Se le achacan méritos y romanticismos exagerados y facilones a los que escriben, pintan o dicen algo ingenioso desde una bohemia comodidad. Desde un bienestar u holganza donde el sudor de la esclavitud laboral y su precariedad, no marca sus inspirados días.
Es fácil y poco meritorio ser intelectual y transgresor cuando eres un afortunado.
Soy adicto al combate, al dolor, la ira y el cansancio. Que se emborronen las palabras con el sudor y escupiendo rabia. O con los dedos mojados de un semen eyaculado con tristeza...
Y así sacar el in-genio de las venas de mis brazos.
De un pene inconsolable...
Bohemios y pensadores de vida fácil y resuelta...
Os enseñaré la verbigracia, el romanticismo y la irreverencia que contienen una gota de sudor y otra sangre. Y a falta de absenta, brindaré por toda la mierda de este mundo con un trago de agua turbia y recalentada.
Ebrio de agotamiento y rabia.
Narcotizado de frustraciones.
Bohemios y sabios de club...
No sabéis nada, ingenuos.
Iconoclasta
Foto de Iconoclasta.