Hay tristezas tan bellas y hondas que me llevan a aborrecer la posibilidad de una sonrisa.
Y siento el alma convulsionarse líquida y arrasadora en los ojos.
Mi primer y hermoso drama en la infancia.
El alto arte es escaso, se da de siglo en siglo, con suerte.
Y yo estuve en ese momento, cuando surgió.
Nunca lo olvidé.
“Ven, ven” la quebrada llamada ha permanecido como un hermoso e íntimo sortilegio en mi memoria. Nunca olvidé, ni olvidaré lo que sentí de niño y de mayor con mayor precisión, un quebranto de hermosura que el tiempo no puede debilitar.
She’s a rainbow (Ella es un arcoíris), es una bellísima canción
de The Rolling Stones, de 1967. Forma parte del álbum Their Satanics Majesties
Request (Sus Satánicas Majestades Solicitan).
He escrito los versos de la letra traducida del inglés y resaltada
en negrita, para responder a cada verso en texto normal con la torpeza y la
urgencia de mis emociones, de la ternura, del amor que rompe los corazones y
los recompone y los pinta y los saca fuera y los mete dentro…
Que los Rolling me perdonen.
Y ella por mi torpeza.
Ella trae colores a
todas partes
está todo tan oscuro, mi amor…
y el cielo me pesa en los hombros
peina su cabello
cada mañana la sueño así a ojos abiertos, y desespero
es como un arcoíris.
solo ella puede dar color a mi sangre
Llegan colores en el
aire.
cada vez que aparece, con su mirada…
¡Oh, por todas
partes!
en todos los rincones de mi mundo y dimensión
Ella viene con
colores
¡Como os espero!
trae colores a todas
partes
mi amor hace magia
peina su cabello
y coquetea consigo misma
a veces, con una melancolía hermosa en la mirada.
es como un arcoíris.
es un rayo de amor y deseo
Llegan colores en el
aire
y su voz arrasando mi serenidad
¡Oh, por todas
partes!
¡Oh, desesperación!
Ella viene con
colores
es la fuerza armada de la esperanza
¿La has visto vestida
de azul?
la he besado en todos los colores
Ves el cielo enfrente
de ti
y crees estar loco de contento
y su rostro es como
una vela
plena de mis besos al viento
de un color tan
hermoso y pálido
que siento ser cosa sin vida
¿Has visto a una
mujer más bella?
es imposible, no hay cosa más hermosa
Ella trae colores a
todas partes
no cesa, contagia el mundo de luz y color
peina su cabello
¿sonreirá pensando en mí en algún momento?
por favor…
es como un arcoíris.
es un trallazo de amor que deslumbra
Llegan colores en el
aire
y se prenden en mi piel ceniza
¡Oh, por todas
partes!
en toda mi carne
Ella viene con
colores
soy un dibujo sin colorear sin ella
¿La has visto toda en
dorado?
y he sentido mi alma retroceder al corazón mismo
Como una reina en la
antigüedad
siempre existió, nací para ella
dispara sus colores a
todo alrededor
no tiene piedad con su desmesurada sensualidad
como una puesta de
sol
como una diosa
¿Has visto a una
mujer más bella?
da terror no ser suficiente para ella
Ella trae color a
todas partes
como si fuera fácil
peina su cabello
y cubrirá mi rostro con él en una caricia vertical
“Lunes antes de almorzar una niña fue a jugar, pero no pudo jugar porque tenía que planchar. Así planchaba, así, así… Así planchaba, así, así… Así planchaba, así, así… Así planchaba que yo la vi”. Cantaba Fofó a los niñas y niños. Y así todos los putos días de la semana: barrer, limpiar, coser, cocinar… Pobrecita… Era una de las canciones de mi juventud que recuerdo con cierta tristeza, me gustaba mucho a pesar de mi avanzada edad (9 años), me parecía la historia de una niña mártir. Unos tachan la canción de sexista, gente que no entiende nada, que busca la miseria como los buitres en las entrañas de los cadáveres sin tener cerebro para elegir la mierda que come. Dicen los descerebrados que la canción era un panfleto para que las niñas se dedicaran a la casa y poco más. Quieren ser tan críticos… Y con tan poco cerebro solo son patéticos. Gentuza sin sensibilidad… La puta verdad, es que unos payasos en la tele, con toda naturalidad, pusieron de manifiesto con sensibilidad y ternura, la pesada losa de esclavitud y mediocridad a la que estaban condenadas las mujeres por tradición. Nadie me hizo pensar a aquella edad con tanta claridad e identificar así una lacra como la que aquella canción ponía de manifiesto. Y con más mérito porque eran tiempos en los que el trozo de mierda que era Franco y sus secuaces, aún tenían secuestrada la inteligencia y la libertad en España. Hoy día la inteligencia no está secuestrada, simplemente no existe a nivel global. La canción no exalta que la mujer deba dedicarse a las tareas domésticas. Lo critica de forma dulce, con una canción infantil. Infinitamente sutil en tiempos de mierda e ignorancia. Una canción para que los niños sintieran esa amarga musicalidad. Mientras los niños juegan, la niña se pudría de asco… “Domingo antes de almorzar, una niña fue a jugar; pero no pudo jugar porque tenía que rezar. Así rezaba, así así… Así rezaba, así... así. A sí rezaba, así, así… A sí rezaba que yo la vi”. Yo pensaba que el domingo realmente no rezaba, solo moría de hastío y cansancio. “Pero no pudo jugar, pero no pudo jugar, pero no pudo jugar, pero no pudo jugar…”. ¿Dónde está el sexismo en esta continua letanía de imposibilidad, idiotas? Me parecía triste, un asomo de depresión. De una sensibilidad exquisita, casi lorquiana. Un beso a la niña muerta que no pudo jugar; pero que supimos de su existencia con cierta triste ternura.