Powered By Blogger

6 de febrero de 2022

E irá a peor


Una vez te escuché, y te amé.

Otra vez reíste, y te amé.

Otra te besé y te amé con la boca abierta como si fueras aire.

Una vez jadeaste cuando estaba dentro de ti, y te amé con la furia atávica del celo animal.

¿Te acuerdas cuando estornudaste? Pues te amé.

Una vez me acariciaste y te rogué que no pararas. Y definitivamente te amé.

Aquel día tardaste demasiado en llegar a casa y añorándote te amé.

Hiciste un plato de lentejas del carajo, no sabían a nada. Te amé más que a mi puta vida.

Y aquella vez que me rompí, mis trozos te amaban.

Las paredes estaban podridas y los grandes gusanos corrían horizontalmente por su interior, abultaban la pared en ráfagas veloces y temía que salieran. Me despertaste: ¡Pablo… Despierta! Y te amé con el corazón desbocado.

Cada gesto, acto o palabra que realizas, es una razón para amarte. Descubrir algo nuevo de ti, es una nueva razón para amarte.

Y todo parece indicar que irá a peor, que me faltará vida para amarte en la totalidad de ti.

Una vez concluí que eras inabarcable y te amé.

Hace unos segundos escribí de ti, y te amé.



Iconoclasta

No hay comentarios: